Un shinigami (死神 Dios de la muerte?) es una personificación de la muerte en la mitología japonesa. No está claro cuándo se originó este concepto en la cultura japonesa y puede haber sido importado de China (donde hay varias divinidades psicopompas, o posiblemente desde Europa durante el período Sengoku, tiempo en la historia europea en la que aparece como motivo común el recolector de almas). Es por lo que el personaje occidental de La Muerte es un equivalente de los shinigamis. El término aparece dos veces en la obra de teatro Shinjū Ten no Amijima or Shinjūten no Amijima de Chikamatsu Monzaemon (1721). El término shinigami se puede usar más libremente para referirse a cualquier deidad de la muerte. Parece ser, sin embargo, un término reciente ya que no pertenece a ninguna deidad Shinto específica y es raramente usado en el folclore. Actualmente, el uso del término shinigami para hacer referencia a un psicopompo y otros seres sobrenaturales asociados con la muerte, es muy común en los mangas y animes japoneses. Por ejemplo, las series, Ballad of a Shinigami, Bleach, Death Note, Full Moon wo Sagashite, Soul Eater, y Kuroshitsuji usan los shinigami como una parte fundamental de la trama.
En los mangas, su función es velar y decidir quien muere y cómo, a veces hasta alimentándose de las almas humanas. Existe un gran misticismo alrededor de esta figura, ya que no se puede delimitar si es buena o mala, aunque -en las narraciones- muchas veces sus decisiones parecen cruentas y horribles. Pero a pesar de que las distintas religiones que les han dado un carácter demoníaco, su carácter es más neutral. Pertenecen a la casta baja de los dioses. Hay relatos que cuentan que estos dioses ayudaron a los humanos a cumplir ciertas tareas.