Sus sentidos agudizados como olfato y oído, unidos a su capacidad para comunicarse con Kiba le covierten en una herramienta poderosa para encontrar y transmitir información. Puede sentir Chakra con su nariz, así que puede medir la fuerza del enemigo y avisar a Kiba en caso de peligro. Además, puede realizar ataques combinados junto a su amo, como aparentar su aspecto para confundir al enemigo.
Durante la saga de la persecución de Sasuke desarrolla una técnica junto a Kiba en la que se transfoman en un gran perro blanco de dos cabezas.